La Unión Americana por las Libertades Civiles (ACLU son sus siglas en inglés) ha puesto en marcha a través de su página web una acción para pedir que Mitch y Cam, la pareja gay de Modern Family, contraigan matrimonio en la serie.
Desde la ACLU recuerdan que actualmente 30 estados contienen
prohibiciones al matrimonio entre personas del mismo sexo en sus
constituciones y piden a los productores de la serie que les ayuden a
concienciar a la opinión pública con la celebración de una boda
‘genuinamente moderna’.
Lo cierto es que en Modern Family no faltan situaciones y
diálogos –siempre en tono de humor- favorables al avance de los derechos
de las personas LGTB. Ya en el episodio piloto, de vuelta de Vietnam de
adoptar a su hija Lily, Mitch pronuncia un ‘discurso’ que es toda una
declaración de intenciones. Este posicionamiento ha trascendido en
ocasiones los argumentos de los episodios, como por ejemplo en la última ceremonia de los Emmy,
donde se emitió un sketch que contenía una burla a la cadena de comida
rápida Chick-fil-A, opuesta al matrimonio igualitario y que financia
organizaciones homófobas. En cuanto a los actores, Jesse Tyler Ferguson,
abiertamente gay, puso en marcha una iniciativa llamada Tie The Knot,
con motivo del anuncio de su compromiso con el abogado Justin Mikita.
Esperemos que los 750.000 seguidores online de la ACLU consigan
convencer a los productores de la serie, Steven Levitan y Christopher
Lloyd. Si la iniciativa prospera, más de 13 millones de estadounidenses
verán la boda del año. Sería una boda en la ficción, justo cuando en la
vida real el Tribunal Supremo de Estados Unidos examina dos causas relacionadas con el matrimonio igualitario. Una de ellas, precisamente, se refiere a la Proposición 8, la enmienda a la Constitución de California (el estado en el que se desarrolla la acción de Modern Family) que prohíbe el matrimonio entre personas del mismo sexo…
fuente. Dos Manzanas.
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